Contexto

Vietnam

Reconociendo la importancia de las pequeñas empresas en la recuperación post-pandémica, Vietnam ha supervisado de cerca su apoyo a las MIPYMES. Según la Oficina General de Estadística, el número de empresas que se desempeñan en la economía vietnamita (excluyendo las empresas disueltas) fue de 760.000 en 2019 y de 765.000 en 2020. Aunque fueron muy afectadas por la pandemia de COVID-19, hubo 137.000 empresas de nueva creación en 2020, con un capital registrado total de casi 2.000 billones de dongs vietnamitas (VND) (86.676.591.849 dólares estadounidenses).  

Sin embargo, la pandemia de COVID-19 ha tenido un grave impacto en las MIPYMES de Vietnam. Según un informe de un sondeo realizado en 2020, Impacto de la pandemia de COVID-19 en las empresas de Vietnam, publicado por la Cámara de Comercio e Industria de Vietnam (VCCI) en colaboración con el Banco Mundial, mostró que el 87,2 por ciento de las empresas encuestadas sufrieron impactos "mayormente" o "totalmente negativos" de la pandemia de COVID-19, mientras que solo el 11 por ciento no vio "ningún efecto" de la pandemia. Mientras tanto, solo el 2% vio un impacto "mayormente positivo" en sus negocios durante la pandemia. Las microempresas y las pequeñas empresas, así como las que tienen menos de tres años de funcionamiento, fueron las más afectadas por la falta de continuidad de los negocios.  

Tanto las empresas privadas nacionales (87,7%) como las empresas de inversión extranjera directa (IED) informaron de experiencias negativas durante la pandemia en 2020. La proporción de empresas encuestadas que informaron de impactos mayoritariamente/totalmente negativos de la pandemia COVID-19 es la siguiente: 

Sectores privados nacionales: 

• Industria de la ropa (97%) 

• Sector de la información y las comunicaciones (96%)   

• Sector de fabricación de equipos eléctricos (94%) 

Sectores con inversión extranjera: 

• Bienes raíces (100%) 

• Información y comunicaciones (97%) 

• Agricultura/Pesca (95%) 

Debido a los efectos de la pandemia de COVID-19, hasta el 65% de las empresas privadas nacionales y el 62% de las empresas con inversión extranjera tuvieron una reducción de sus ingresos en 2020. La reducción promedio de los ingresos de las empresas privadas nacionales fue del 36% y en el caso de las empresas con inversión extranjera fue del 34%.  

La reducción promedio de ingresos fue mayor en las MIPYMES que en las grandes empresas. El informe también señala que la pandemia ha dificultado a las MIPYMES el acceso a los clientes y la contratación de trabajadores. La pandemia también ha interrumpido las cadenas de suministro y ha implicado costos adicionales de prevención de COVID-19 para las MIPYMES. Muchas empresas han visto sus negocios interrumpidos y han dejado de trabajar debido a la pandemia, e incluso han estado al borde de la quiebra debido a la repentina disminución de la demanda. Algunas empresas tuvieron que retrasar el avance de sus inversiones o incluso cancelar proyectos en curso o futuros. Todos estos impactos de la pandemia, han hecho que las MIPYMES de Vietnam reduzcan sus costos mediante la reducción de las horas de trabajo, el recorte de los salarios y el despido de personal, y las ha obligado a ajustar los modelos de negocios para recurrir más a las plataformas digitales y las soluciones digitales.  

Apoyo del Gobierno  

En respuesta a la crisis, el gobierno vietnamita ha puesto en marcha varios programas de apoyo a las empresas y los trabajadores. Introdujo medidas para aplazar las obligaciones del impuesto al valor agregado (IVA) y del impuesto a las sociedades (CIT), redujo las tasas del CIT para las micro y pequeñas empresas, y aplazó las contribuciones al fondo de pensiones y los préstamos sin intereses para el pago de los salarios. A continuación se enumeran las políticas de apoyo específicas que se aplicaron:  

Por la Asamblea Nacional:  

1. Resolución núm.107/2020/QH14 de fecha 10 de junio de 2020: ampliación de la exención del impuesto sobre el uso de tierra agrícola;  

2. Resolución núm. 116/2020/QH de fecha 19 de junio de 2020: reducción del CIT en un 30% en 2020;  

3. Resolución núm. 979/2020/NQ-UBTVQH14, de fecha 27 de julio de 2020: reducción del 30% del impuesto al combustible aéreo para la protección ambiental hasta finales de 2020;  

4. Resolución núm. 135/2020/NQ14 de fecha 17 de noviembre de 2020: apoyo a las industrias y los sectores más afectados la pandemia, incluida la industria de la aviación.  

Por el gobierno y el primer ministro:  

1. Decreto núm. 41/2020/ND-CP de fecha 8 de abril de 2020 y la Resolución núm. 84/NQ-CP de fecha 29 de abril de 2020: apoyo a los préstamos financieros y a las pensiones, en el que se reduce el impuesto sobre el uso de la tierra en un 15% para 2020 y se reducen las tasas de interés de los préstamos del fondo de desarrollo de las PYMES en un 2%.    

2. Resolución núm. 42/NQ-CP de fecha 9 de abril de 2020: apoyo a los trabajadores y a las personas que están en una situación difícil debido a la pérdida de empleo e ingresos;  

3. Decreto núm. 70/2020/NĐ-CP de fecha 28 de junio de 2020: prórroga del plazo para el depósito de impuestos (impuestos especiales) de la industria nacional de fabricación de automóviles;  

4. Decisión núm. 22/2020/QĐ-TTg, de fecha 10 de agosto de 2020: reducción de la tasa de arrendamiento de tierras en un 15% para 2020 para las empresas, organizaciones, hogares y personas más afectadas. 

Según la Primera ronda del sondeo del estado empresarial ante la Covid-19 realizada por el Banco Mundial en junio de 2020, alrededor del 20 al 30 por ciento de las pequeñas, medianas y grandes empresas tuvieron acceso a apoyo gubernamental. Entre los diferentes tipos de apoyo gubernamental, las tres principales formas de apoyo que necesitan las empresas son:  

• exenciones o reducciones fiscales (73%)  

• aplazamiento de impuestos (47%) y  

• préstamos a tasas subvencionadas (40%).  

Los resultados de la encuesta también indican que las empresas del sector agrícola y de otros servicios tienen una mayor necesidad de exenciones o reducciones fiscales, en comparación con las empresas del sector manufacturero. Las dos razones más importantes por las que las empresas no reciben ayuda del gobierno son la falta de elegibilidad y la falta de información. 

Prioridades para el futuro de las MIPYMES y el gobierno  

Para sobrevivir y desarrollarse de forma sostenible ante el impacto negativo de la pandemia de COVID-19, las MIPYMES de Vietnam deben priorizar el ajuste de sus modelos de negocio para acelerar la aplicación de la tecnología digital y responder a las necesidades de los clientes locales.  

Además, las MIPYMES deben reforzar su posición en la cadena de valor global. En general, aprender de los buenos modelos y prácticas para hacer frente a la pandemia de COVID-19 debería ser una prioridad de las MIPYMES en un futuro próximo. Al hacerlo, las empresas pueden mirar hacia atrás para ver lo que ha sucedido y lo que podría suceder con su negocio y hablar sobre las maneras de fortalecer la cooperación y sus relaciones para avanzar en el futuro. 
 
Para ayudar a que las empresas tengan una transición sostenida hacia la "nueva normalidad", será necesario un apoyo inteligente y eficaz del gobierno, tanto a corto como a largo plazo. Consciente de ello, el gobierno vietnamita ha dado prioridad al desarrollo y la aplicación de políticas que crean condiciones más favorables para que las empresas sobrevivan y se desarrollen en el mundo después de la pandemia de COVID-19.  

Las políticas gubernamentales deben ayudar a las industrias a ser menos dependientes de fuentes externas y a abordar la situación de desempleo que existe desde hace tiempo; al mismo tiempo, deben añadir valor y refuerzan la posición de Vietnam en las cadenas de suministro mundiales y crear más oportunidades para beneficiarse de los TLC que exigen un alto porcentaje de contenido de origen nacional e intrarregional.  

Con el fin de mejorar la accesibilidad de las políticas de apoyo para las empresas afectadas por la COVID-19, el gobierno debe reforzar la difusión de las políticas de apoyo proporcionando instrucciones específicas, detalladas y completas sobre procedimientos que sean sencillos y fáciles de aplicar. Además, el gobierno necesita evaluar los problemas y las deficiencias del proceso de implementación para recomendar ajustes oportunos y el tipo de apoyo apropiado para las empresas de cada industria, sector y período específico, particularmente en las industrias que se ven gravemente afectadas por la pandemia de COVID-19. 

Según muchos pronósticos, la pandemia de COVID-19 seguirá proyectando una larga sombra sobre la economía mundial y solo podrá eliminarse por completo al cabo de cuatro o cinco años. Por ello, el estudio y la promoción de políticas de apoyo a largo plazo para las empresas debe ser una prioridad absoluta para el gobierno vietnamita en el futuro inmediato. 

Filipinas

Las micro, pequeñas y medianas empresas (MIPYMES) representan el 99,5% de las empresas registradas en Filipinas y el 46% del PIB de la economía. Estas empresas emplean a más de la mitad (63%) de la mano de obra total del país. La mayoría de las MIPYMES realizan sus actividades en mercados nacionales limitados. Las MIPYMES representan el 25% de los ingresos totales de las exportaciones del país, aunque se estima que el 60% de todos los exportadores pertenecen a la categoría de MIPYMES a través de subcontratos o como proveedores de las empresas exportadoras. 

Las MIPYMES en Filipinas se definen de la siguiente manera: 

Según los últimos registros del organismo oficial de estadísticas de Filipinas, que son de 2019, un total de 1.000.506 empresas comerciales operan en la economía. Las microempresas constituyen la mayoría de estas empresas, con un 89% (891.044), seguidas por las pequeñas empresas, con un 10% (99.936), y las medianas, con un 0,5% (4.765). Casi dos tercios de las MIPYMES registradas se encuentran en cinco lugares principales: la Región de la Capital Nacional (20,2% de las empresas), Calabarzón, Luzón (14,8%), Luzón Central (11,6%), Visayas Central (7%) y Visayas Occidental (6,1%).  

Los cinco sectores industriales principales en los que participa la mayoría de las MIPYMES (83%) son:  

1. Comercio mayorista y minorista / reparación de vehículos de motor y motocicletas (462.492); 

2. Actividades de alojamiento y servicios de alimentos (144.024); 

3.  Industria manufacturera (115.387);  

4. Otras actividades de servicios (65.918); y  

5. Actividades financieras y de seguros (46.100).    

El comercio electrónico ha crecido rápidamente en Filipinas. Sin embargo, los emprendedores se ven obstaculizados por la lentitud del servicio de Internet en Filipinas, catalogado como el más lento y caro de Asia. La mayoría de los proveedores de servicios de comercio electrónico, como Facebook, son empresas extranjeras. Por otro lado, sigue creciendo la subcontratación de procesos empresariales de tecnología de la información en forma de centros de llamadas y servicios relacionados con la informática, como desarrolladores de software/juegos, animación e ingeniería informática.  

Entre los retos a los que se enfrentan las MIPYMES, señalados por el Banco Asiático de Desarrollo y otros investigadores, algunos de los obstáculos clasificados como más importantes son: 

• la corrupción y los elevados aranceles en los mercados de exportación 

• la calidad de las instalaciones de telecomunicaciones 

• puertos, aeropuertos y otros tipos de infraestructura comercial 

• falta de acceso a la financiación 

• falta de disponibilidad de mano de obra calificada 

• poco apoyo institucional 

• dificultad para cumplir con las normas internacionales sobre productos y servicios 

Las mujeres emprendedoras filipinas se enfrentan a retos adicionales. Según la información de la Fundación Asia-Pacífico de Canadá en la Encuesta de Emprendedores y MIPYMES 2018 de Filipinas , el 39% de las mujeres encuestadas informaron de que su empresa carecía de acceso a cualquier servicio de apoyo, mientras que el 36% declaró no tener interés en tener acceso a los servicios de apoyo. Estas proporciones son más del doble de las declaradas por los hombres.  Además, los resultados de la encuesta muestran que las mujeres emprendedoras declararon tener menos acceso a los servicios de asesoramiento empresarial en línea que los hombres emprendedores (7% comparado con 19%, respectivamente).  

Situación de las MIPYMES filipinas con respecto a la pandemia de COVID-19 

Filipinas sigue luchando contra la peor crisis de COVID-19 del sudeste asiático. Hay confinamientos estrictos, pero la falta de pruebas, de rastreo de contactos y de contención y las bajas tasas de vacunación provocan un aumento de los casos. La encuesta del Banco Asiático de Desarrollo de 2020 Navegando por la pandemia de COVID-19 en Asia y el Pacífico, realizada entre marzo y mayo de 2020 a 3.877 MIPYMES, informó lo siguiente:  

1. Filipinas tuvo las tasas más altas de suspensión de operaciones un mes después de la propagación del virus,  

2. las tasas más altas de retraso en la entrega de productos o servicios, y  

3. las tasas más altas de despido temporal de personal.  

Casi el 60% de las MIPYMES encuestadas en Filipinas declararon que sus ingresos eran nulos, mientras que el 28% dijo que los ingresos habían caído más del 30%.  

En comparación con las MIPYMES encuestadas de otras economías, las MIPYMES filipinas fueron las que más cancelaron contratos (19,1%) y retrasaron la entrega de productos y servicios (35%) durante el confinamiento. Entre marzo y abril de 2020, el 36,7% de las MIPYMES de Filipinas afirmaron no tener dinero en efectivo ni ahorros, mientras que el 42,1% dijo que el dinero en efectivo se agotaría en un mes. Incluso antes de la pandemia, el acceso a la financiación era el mayor obstáculo para las MIPYMES. En el momento máximo de los confinamientos, en marzo y abril, el 17% de los encuestados solicitaron préstamos bancarios, mientras que solo el 4,4% de las MIPYMES pudieron tener acceso a créditos bancarios, recurriendo sobre todo a ahorros o a préstamos de amigos y familiares. Otras economías de laAPEC  pudieron aprovechar el aumento de la demanda mundial de productos electrónicos para aumentar la manufactura local, pero Filipinas depende del turismo y de las remesas de los trabajadores en el extranjero, por lo que redujo sus pronósticos económicos hasta alcanzar el menor crecimiento de la región. 

En octubre de 2020, en una encuesta del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) sobre el impacto de la pandemia de COVID-19 en las MIPYMES, el 60% de los encuestados informó que aún no había recibido ninguna ayuda de ninguna parte interesada (gobierno, sector privado, ONG u otros). Las necesidades más urgentes señaladas fueron el acceso a facilidades crediticias, las exenciones fiscales y el aplazamiento del pago de préstamos. Entre las recomendaciones del informe se incluyeron la mejora de la seguridad y la eficiencia del transporte público para la movilidad segura de personas y productos, y la necesidad de mejorar la gestión de la cadena de suministro por medio de más contrataciones locales.  

Apoyo y políticas clave 

Incluso antes de la pandemia, el gobierno había implementado una serie de políticas para apoyar a las MIPYMES filipinas. 

El Departamento de Tecnología de la Información y de las Comunicaciones ha promovido un programa llamado "digitaljobsPH" para los trabajadores independientes en línea o los negocios en hogares que operan por Internet, incluyendo las MIPYMES, para fomentar el uso del comercio electrónico. Durante 2018-2019, más de 2.000 personas se graduaron del programa, y además se crearon 700 MIPYMES (negocios en línea) con el respaldo de este programa. 

Las designación Barangay Micro Business Enterprise (BMBE) de 2002 para las microempresas sigue creciendo a pesar de que no es muy conocida entre las MIPYMES y las unidades de gobierno local que la implementan. Esta designación exime a las microempresas del pago de los impuestos sobre la renta y el valor agregado, así como de otros impuestos porcentuales. Las instituciones financieras reciben incentivos para conceder préstamos a las empresas registradas como BMBE y están obligadas a ofrecer una ventanilla de crédito especial para las BMBE. Las BMBE también tienen acceso a una programación gratuita a través de Negosyo/Centros Empresariales del Departamento de Comercio e Industria (DTI), del Instituto de la Universidad de Filipinas para las Industrias de Pequeña Escala (UP-ISSI) y del Departamento de Ciencia y Tecnología (DOST). En 2017 se registraron más de 12.000 BMBE, aunque el Banco Mundial estima que el 40% de la economía filipina es economía subterránea o sumergida. 

Además de las políticas de apoyo existentes, el gobierno ha implementado más medidas para ayudar a las MIPYMES durante la pandemia de COVID-19.  

• En abril de 2020, el Departamento de Comercio e Industria (DTI) anunció un período de gracia mínimo de 30 días para los alquileres residenciales y comerciales a partir de la suspensión de varias etapas de confinamiento. Los inquilinos tienen la opción de pagar el importe acumulado de los alquileres residenciales y comerciales que hayan vencido dentro de las etapas de confinamiento en cuotas igualmente amortizadas en seis meses después del final del período mínimo de gracia de 30 días. Todos los alquileres que no se hayan pagado durante las etapas de confinamiento no incurrirán en intereses, penalizaciones, tasas ni otros cargos. Durante el periodo de cuarentena no se podrá realizar ningún desahucio por falta de pago del alquiler residencial o comercial. 

• El Departamento de Comercio e Industria (DTI) también ha proporcionado apoyo para las MIPYMES en su transición a las ventas en línea. En 2020, el programa Go Lokal del DTI ayudó a 131 MIPYMES y a 1.000 productos a realizar la transición a sitios locales de venta en línea.  

• El programa de microfinanciación Asistencia para la Reactivación de Empresas por la pandemia de COVID-19 (CARES)  ofrece préstamos a un tipo de interés del 0% pagaderos en 18-24 meses. Hasta la fecha, se han aprobado más de 20.000 solicitudes.  

• El programa de garantías de crédito PhilGuarantee del Departamento de Finanzas ha prolongado su apoyo a las MIPYMES hasta septiembre de 2021. En 2020 se aprobaron casi 3.000 garantías de crédito por un total de 4,5 millones de dólares canadienses. 

En marzo de 2021, el presidente Rodrigo Duterte autorizó una reducción del 10% del impuesto a las corporaciones. Sin embargo, Filipinas mantiene las tasas impositivas más altas del sudeste asiático, con un 30%. 

Prioridades para el futuro de las MIPYMES en Filipinas 

Antes de la pandemia, las MIPYMES de Filipinas ya habían informado de problemas financieros, como la acumulación de deuda. Por lo tanto, los programas de subvenciones del gobierno serían más eficaces que los préstamos. 

Dado que casi la mitad de la economía se atribuye a empresas no registradas, el programa Barangay Micro Business Enterprise (BMBE) mencionado anteriormente es un buen ejemplo de una iniciativa que beneficia a las MIPYMES con un estatus libre de impuestos al tiempo que les da acceso a capacitación, crédito y servicios compartidos, lo cual es muy valioso. El gobierno puede mejorar las tasas de participación en estos programas de capacitación y apoyo a la financiación con mejores campañas de comunicación dirigidas al público de las MIPYMES y a través de canales de redes sociales populares y gratuitas como Facebook e Instagram. Un apoyo adicional a través de asociaciones de logística y plataformas en línea dirigidas y una gamificación de las estrategias de venta en línea ayudarían a crear un flujo constante de apoyo para hacer destacar a las MIPYMES seleccionadas y las tendencias del mercado.  

El tema del trabajo independiente y la "economía de encargos" (gig economy) también está relacionado con las MIPYMES. Filipinas también está clasificada como una de las economías de trabajadores independientes más importantes del mundo, con un crecimiento de los ingresos del 35% en la economía de encargos.  El gobierno filipino debe implementar leyes que puedan ayudar a proteger a los trabajadores independientes de la explotación, y puedan cultivar un entorno más equitativo y una base de clientes a largo plazo para evitar caer en las trampas que se dan en las economías de encargos. 

Y lo que es más importante, dado que las mujeres están al frente de la mayoría de las MIPYMES, es necesario desarrollar más investigación y programación para comprender y abordar la falta de acceso de las mujeres a infraestructuras básicas como carreteras, financiación, equipamiento y formación, pues ellas representan la mayor parte de los medios de sustento y de las responsabilidades domésticas.  

Perú

Las MIPYMES son el principal tipo de empresa en Perú, dado que representa más del 99% del total de empresas de la economía. En el Perú, la definición de MIPYME está definida por la ley Núm. 30056, que fue creada para facilitar la inversión y promover el desarrollo productivo y el crecimiento empresarial de las MIPYMES. Esta ley es la base para categorizar a las MIPYMES según las ventas totales de cada tipo de empresa:  

• Microempresa: Ventas anuales hasta un monto máximo de 150 UIT1s - S/. 660.000 (US$183.000); 

• Pequeña empresa: Más de 150 UITs y hasta un monto máximo de 1.700 UITs - S/. 7.480.000 (US$2.1 M aprox.); 

• Mediana empresa: 1.700 UITs y hasta un monto máximo de 2.300 UITs - S/. 10.120.000 (US$2.8 M aprox.); y 

• Gran empresa: Ventas anuales mayores a 2.300 UITs. 

La mayoría de las empresas en Perú son microempresas (96,2%), que contribuyen a aproximadamente al 40% del PIB y a más del 60% del empleo. Sin embargo, solo el 6% de la productividad puede atribuirse a las MIPYMES a pesar de que constituyen la mayor parte de la economía. Desgraciadamente, las MIPYMES tienen menos impacto en el crecimiento económico y social debido al predominio de las empresas informales en todos los sectores.   

La pandemia mundial ha impactado negativamente en todas las empresas de Perú, especialmente en las MIPYMES. Debido a su tamaño y a la falta de recursos, muchas MIPYMES no contaban con las herramientas necesarias para enfrentar el impacto de la pandemia de COVID-19. Según un informe de la Organización Internacional del Trabajo, tanto las tasas de desempleo como de empleo informal en Perú han aumentado. Por ejemplo, la población económicamente activa (PEA), que incluye a las personas que trabajan o que buscan activamente trabajo, se redujo en más de 6 millones de personas. Asimismo, los niveles de ingresos de las familias peruanas se han reducido considerablemente.   

En agosto de 2020, casi el 25% de las empresas habían dejado de funcionar. De las que sobrevivieron:   

• el 77% ha tenido una reducción en su demanda,  

• el 59% indicó que tiene altos costos para implementar protocolos de seguridad,  

•  el 52,8% tenía retrasos en el cobro de facturas,  

• el 4% ha detenido su producción, y 

• el 45% perdió su capital circulante.  

La mayoría de las empresas también se enfrentaron a otros problemas, como la falta de liquidez para comprar materias primas y pagar a los proveedores, y el acceso limitado a los recursos financieros. 

Según el Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial de la Cámara de Comercio de Lima, se estima que el PIB de Perú se contraerá en un 3,7% debido a la pandemia de COVID-19. Las restricciones relacionadas con la pandemia han provocado una caída de la demanda y la interrupción de los negocios que han afectado gravemente a las MIPYMES. 

Principales políticas gubernamentales de apoyo a las MIPYMES: 

En 2020, el gobierno ayudó a las MIPYMES durante la pandemia ofreciéndoles diferentes tipos de instrumentos de apoyo centrados en: la financiación de la deuda, los impuestos, el apoyo al empleo y la demanda. Hubo más de 10 instrumentos de apoyo desarrollados por el sector público en un esfuerzo colectivo sin precedentes (Figura 1). 

Figura 1 
Número de instrumentos por tipo de apoyo 
Fuente: Mapa de medidas de apoyo a las PYMES en respuesta a la pandemia de COVID-19, Banco Mundial 

Tabla 1 
Descripción de los instrumentos 
Adaptado de: Mapa de medidas de apoyo a las PYMES en respuesta a la pandemia de COVID-19, Banco Mundial 

Para hacer frente a los retos que enfrentan las MIPYMES, el Ministerio de Economía y Finanzas también creó iniciativas como el programa Reactiva Perú y el Fondo de Apoyo Empresarial para las MIPYMES.  

Además de estas políticas públicas clave, muchas MIPYMES en el Perú han tenido que emplear varias medidas o estrategias para sobrevivir. Según un documento titulado "COVID-19: Una evaluación de las estrategias de supervivencia de las MIPYMES en Nigeria y Perú (Chambe y Uchenna 2020), muchas MIPYMES se centraron en reducir la masa salarial despidiendo a algunos empleados, mejoraron la estrategia de recuperación de deudas, mejoraron la negociación con los acreedores, aprovecharon los paquetes de apoyo a las MIPYMES del gobierno y de otras entidades, y emplearon canales digitales. 

Prioridades para el futuro de las MIPYMES peruanas

El impacto negativo de la segunda ola de COVID-19 y la posible tercera ola traen consigo nuevos retos para las MIPYMES y la economía en su conjunto.  Si bien la prioridad del gobierno es reactivar y recuperar el crecimiento económico en el Perú, un enfoque individual ya no es una opción. Es vital que todos los actores del ecosistema contribuyan para apoyar a las MIPYMES y a los emprendedores. 

Según el Rastreador de Políticas del Fondo Monetario Internacional (FMI), el acceso a fondos, créditos y subvenciones (Ej. FAE MyPES, FAE Turismo, Reactiva Perú, Programa de Garantías Covid-19, Todos Conectados, entre otros) son relevantes y cruciales para las MIPYMES en Perú. Sin embargo, el sector privado y las organizaciones de la sociedad civil pueden contribuir a brindar el apoyo técnico, la capacitación y el perfeccionamiento de las empresas, para que cuenten con las herramientas adecuadas que promuevan su mejoramiento y crecimiento, generando así un impacto positivo para las partes interesadas.  

Indonesia

En Indonesia hay más de 64 millones de MIPYMES, lo que convierte a estas empresas en la columna vertebral de la economía. Las MIPYMES representan el 99% de las empresas existentes y contribuyen en más del 60% al Producto Interior Bruto (PIB) nacional. Muchas de estas MIPYMES son pequeñas empresas caseras del sector agrícola o del sector minorista. Según el Banco de Indonesia, el banco central de la economía, a pesar de la gran contribución de las MIPYMES indonesias, estas enfrentan tres retos fundamentales: (1) acceso a la financiación, (2) acceso a los mercados y (3) acceso a la tecnología y las infraestructuras. 

Políticas de apoyo a las MIPYMES 

En los últimos años, el gobierno indonesio impulsó un gran número de programas y lineamientos para acelerar el proceso de digitalización de sus MIPYMES con el fin de alcanzar el objetivo de digitalizar a 30 millones de MIPYMES. El gobierno ha colaborado con el sector privado, en concreto con las empresas nuevas (startups) tecnológicas indonesias, y ha desplegado programas como:  

1. #MelajubersamaGojek: una iniciativa de GoJek apoyada por el Ministerio de Cooperativas y PYMES, ayuda a las MIPYMES a implementar estrategias de digitalización en cada paso de sus operaciones diarias de negocios: la comercialización, el pedido (procesamiento de pedidos), el pago, la entrega y la administración. 

2. UMKM go Digital: una iniciativa del Ministerio de Asuntos Marítimos e Inversión que incluye una serie de programas de desarrollo de capacidades que incluyen talleres y capacitación que buscan dotar a las MIPYMES de habilidades y conocimientos para el desarrollo de marcas, marketing y de negocios y de esta manera competir en el mercado digital actual.  

Innovation Factory es un centro de tecnología e innovación con sede en tres grandes ciudades (Yakarta, Bandung y Yogyakarta), el cual demuestra que una de las maneras más eficaces de ayudar a nuestro sector de las MIPYMES a crecer y prosperar es invertir en un sólido ecosistema de empresas tecnológicas nuevas. En el caso de Indonesia, las empresas tecnológicas nuevas han demostrado una y otra vez su gran eficacia a la hora de aprovechar la tecnología para ofrecer apoyo a las MIPYMES - a las cuales es frecuentemente difícil llegar - a través de innovaciones en áreas críticas como el acceso al capital, el acceso a los clientes, el ahorro de costos y la optimización operativa. 

Prioridades clave para las MIPYMES en Indonesia  

Acceso a capital alternativo  

Las MIPYMES necesitan capital para iniciar y mantener sus operaciones. Sin embargo, la mayoría de ellas son demasiado pequeñas para tener acceso al apoyo bancario. La mayoría de los indonesios aún no tienen acceso a servicios financieros adecuados, como cuentas bancarias, préstamos, etc. 

Debido a la singular geografía de Indonesia como archipiélago, la fragmentación geográfica y la falta de intercambio de datos son problemas comunes. Como consecuencia, las instituciones financieras tradicionales tienen dificultades para atender las necesidades de la mayoría de las MIPYMES, especialmente las micro y pequeñas empresas. 

Sin embargo, hay un fuerte crecimiento en el número de empresas nuevas de tecnología financiera (fintech) que han recibido un fuerte respaldo financiero de los capitales emprendedores (tanto locales como internacionales) para crear fuentes de financiación alternativas que apoyen al mercado de las MIPYMES sin explotar, centrándose en sectores específicos como la agricultura y el comercio minorista. 

A continuación se presentan ejemplos de empresas nuevas de tecnología financiera en el sector agrícola, el sector más grande de las MIPYMES en Indonesia. 

• GrowPal - Ofrece una plataforma de financiación colectiva llamada crowdfunding para que los acuicultores de Indonesia (principalmente aquellos dedicados a la piscicultura y la cría de camarones) tengan acceso a capital de inversores minoristas para ampliar sus operaciones. GrowPal también ofrece a los acuicultores acceso a tecnología moderna que les ayuda a ser más eficientes y a mejorar la supervisión de las granjas acuícolas para que puedan reducir sus costos de explotación (optimización de la alimentación) y aumentar los beneficios (optimización del rendimiento). 

• TaniHub - ofrece servicios integrales a lo largo de la cadena de valor, desde la granja hasta la mesa, beneficiando tanto a los agricultores como a las empresas y a los consumidores minoristas. Proporciona a los agricultores acceso al capital para comprar materias primas y equipo, como semillas, fertilizantes y maquinaria. Además, también ha creado sólidas cadenas de suministro para ayudar a los agricultores a enviar sus cosechas directamente a los clientes. A principios de 2020, la empresa se ha asociado con éxito a más de 30.000 pequeños agricultores y gestiona cinco centros de distribución en todo el país. La empresa también atiende a más de 5.000 clientes empresariales y 115.000 clientes minoristas a través de su plataforma. Desde 2016, la empresa ha recaudado más de 26 millones de dólares en financiación de fondos bien establecidos en la región para apoyar su crecimiento con el fin de llegar a más de 100.000 pequeños agricultores en Indonesia. 

Acceso a los clientes 

Uno de los retos más difíciles para las empresas es tener acceso a los clientes de manera rentable. Estos retos son aún mayores para las microempresas y las pequeñas empresas debido a su falta de capital y de conocimientos para tener acceso a herramientas, como la presencia digital, el marketing en línea, el crecimiento acelerado (growth hacking), etc. La mayoría de ellas no pueden llegar a los clientes de manera eficiente, no logran crecer (se quedan estancadas) o cierran el negocio por completo.  

Innovation Factory ha observado que en el país hay un fuerte crecimiento de las empresas nuevas con gran éxito en el mercado, las cuales proporcionan una plataforma y un ecosistema propicios para que crezca un gran número de MIPYMES. Estas proporcionan estandarizaciones que son fáciles de usar, gastan una gran cantidad de su propio capital para atraer a los consumidores indonesios al comercio en línea, y desarrollan una sólida red de la cadena de suministro para apoyar el flujo de bienes y servicios en todo el país. 

A continuación se presentan varios mercados nuevos, pero muy esenciales, que atienden las necesidades de 275 millones de indonesios que habitan las 17.508 islas del archipiélago: 

• Tokopedia (Mercado de comercio electrónico) 

• Fundada en 2009 (empresa de 12 años) 

• Financiación total recaudada hasta ahora: $2.800 millones 

• Emplea a 4.700 trabajadores digitales (cifras de 2019) 

• En 2019, el valor bruto de la mercancía (GMV) de Tokopedia alcanzó 73 billones de rupias indonesias (IDR) (USD 5.100 millones) en 2018 y se espera que el valor aumente a 222 billones de IDR (15.600 millones de USD) en 2019, lo que equivale al 1,5% de la economía indonesia 

• En 2019, según un informe de iPrice Group, Tokopedia fue el sitio web de comercio electrónico más visitado en Indonesia entre julio y septiembre con un promedio de 65.953.400 visitas mensuales, que es el 25% del mercado total. 

• En noviembre de 2019, Tokopedia contaba con más de 7.000.000 de comerciantes y más de 200 millones de productos curados que van desde alimentos y bebidas hasta productos de belleza y moda. (fuente) 

• Gracias al apoyo proporcionado por los mercados tales como Tokopedia, las MIPYMES ahora tienen una presencia nacional y son capaces de servir a los clientes más allá de sus geografías locales a través de su presencia en línea, el procesamiento de pagos y las redes de entrega eficientes. 

• Gojek (Mercado según la demanda) 

• Fundada en 2010 (hace 11 años) 

• Financiación total recaudada hasta ahora: $5.000 millones  

• Emplea a 3.000 trabajadores digitales (a partir de 2019 ) 

• Gojek aportó IDR 8,2 billones (USD 572 millones) anuales a la economía indonesia a través de los ingresos de los socios impulsores. Desde que los socios mercantiles de las PYMES se unieron a Go-Food, se aportan IDR 138.600 millones (USD 9.668.175) adicionales al mes a la economía nacional, y IDR 1,7 billones (USD 118.5 millones) a la economía indonesia a través de los ingresos de los socios mercantiles de las PYMES. [Por favor, ayuden a convertir a USD para referencia]. 

• Gojek ha puesto en línea muchas tiendas familiares, lo que les ha ayudado a enfrentar la pandemia de COVID manteniendo el acceso a los clientes incluso cuando los negocios minoristas fuera de línea se detuvieron por completo durante el confinamiento nacional. 

Acceso a la tecnología 

La tecnología es uno de los recursos más importantes que cualquier organización puede utilizar para optimizar sus operaciones, ser más eficiente, reducir costos y lograr un mejor escalamiento. Sin embargo, dado que las MIPYMES suelen ser más lentas a la hora de adoptar un nuevo producto o una innovación, a menudo se las clasifica como "rezagadas" dentro del ciclo de adopción de tecnología. Son más difíciles de alcanzar, más difíciles de capacitar y más renuentes a probar cosas nuevas. 

Ha sido un reto desalentador para muchos organismos gubernamentales encargados de impulsar la digitalización. Sin embargo, estamos viendo mayores éxitos en esta área gracias a empresas nuevas de gran talento y bien capitalizadas que buscan oportunidades para servir a estas MIPYMES, en gran parte sin explotar, donde la mayoría de las actividades de negocios todavía se realizan con lápiz y papel.  

A continuación se mencionan algunas empresas nuevas exitosas que operan en este ámbito: 

• MOKA  

• Moka es una empresa nueva de tecnología financiera indonesia que se centra en la creación de puntos de venta móviles (mPOS) para pequeñas y medianas empresas. 

• Fundada en 2014 (7 años de antigüedad). 

• Recientemente fue adquirida por Gojek por $130 millones (2020) 

• Ha apoyado a más de 40 mil comerciantes y ha registrado más de 600 millones de transacciones 

• Sus servicios incluyen informes de ventas, gestión de inventarios, gestión de tablas, programas de fidelización y más. 

• BukuWarung 

• La plataforma ayuda a mejorar el proceso de contabilidad de una empresa mediante el seguimiento de todas sus transacciones, incluyendo su crédito, sus gastos y sus ventas, y ayuda a que los comerciantes vean el flujo de efectivo a través de informes de negocios. 

• Fundada en 2019 (2 años de antigüedad como empresa nueva) 

• Financiación total hasta la fecha: $20 millones 

• BukuWarung afirma que ha prestado servicios a más de 3,5 millones de comerciantes registrados en 750 ciudades y pueblos de Indonesia, la mayoría de ellos de ciudades de nivel 2 y 3. La empresa también afirma que ha registrado transacciones por más de USD 15.000 millones en su plataforma. 

• Desde su fundación, la empresa ha registrado transacciones por más de 15.000 millones de dólares en su plataforma. 

En resumen, las organizaciones en el terreno, como Innovation Factory, creen firmemente que la inversión en el crecimiento de un próspero ecosistema de empresas tecnológicas tiene uno de los mejores rendimientos de inversión al apoyar el crecimiento de las MIPYMES en cualquier economía. 

Mujeres emprendedoras en un mundo post-pandémico

Sini Maria Heikkila, Asesora Principal de la Fundación Cherie Blair para la Mujer 

El número de mujeres emprendedoras ha aumentado de manera constante en la región de Asia-Pacífico, con más de 60 millones de mujeres que operan empresas en toda la región. La mayoría de estas empresas son micro, pequeñas y medianas empresas (MIPYMES). A medida que la región busca una recuperación económica durante y después de la pandemia de COVID-19, ahora es más importante que nunca invertir en este enorme potencial de mujeres emprendedoras para impulsar el crecimiento económico, crear puestos empleos y, lo que es más importante, garantizar el pleno respeto de los derechos económicos de la mitad de la población de la región.     

Desde el inicio del programa de tutorías de la Fundación Cherie Blair para la Mujer (CBFW) en la región de la APEC en 2012, la Fundación ha trabajado con más de 500 mujeres emprendedoras de la región proporcionándoles capacitación, tutorías y oportunidades para crear redes de contactos. 

En el último año, la pandemia de COVID-19 ha tenido un impacto devastador y desproporcionado en las mujeres emprendedoras tanto a nivel mundial como en la región. CBFW’s recent research, drawing on the responses from 125 women across 32 countries, shows the stark impacts of COVID-19 on women entrepreneurs. La mayoría de las mujeres emprendedoras encuestadas (83,80%) indicaron que la pandemia ha tenido un impacto negativo en sus negocios. Casi cuatro de cada 10 mujeres (38,5%) respondieron que su negocio podría tener que cerrar como consecuencia de ello. Más de un tercio de estas mujeres (34,4%) señalaron que tendrían dificultades para cubrir necesidades, como la alimentación, si su negocio cerrara.  

Además, las mujeres emprendedoras tienen dificultades para obtener financiación de los prestamistas tradicionales, como los bancos y los inversores. Muchos paquetes de estímulo económico creados para abordar el impacto negativo de la pandemia de COVID-19 no han llegado a las empresas que son propiedad de mujeres. La carga en cuanto a cuidados no remunerados ha aumentado durante la pandemia. Por ejemplo, el 75% de las mujeres emprendedoras entrevistadas por ONU Mujeres en Asia y el Pacífico afirmaron que sus responsabilidades en cuanto a cuidados aumentaron debido a la pandemia de COVID-19. Sectores feminizados como el turismo, el entretenimiento, el comercio minorista, hotelería y restaurantes se han visto desproporcionadamente afectados por la pandemia.  

El estudio de ONU Mujeres en Asia y el Pacífico sobre los impactos de la pandemia de COVID-19 revela más información sobre la situación de las mujeres emprendedoras en la región. De las mujeres emprendedoras encuestadas, el 86% dice haberse visto afectada negativamente o muy negativamente por la pandemia de COVID-19 y el 34% informó de que pronto podría tener que cerrar sus operaciones totalmente.  

Aunque la pandemia ha sido, sin duda, un gran reto para muchas mujeres emprendedoras, es fundamental recordar que, incluso antes de la pandemia, era necesario tener condiciones más justas para las mujeres emprendedoras. Había barreras legales, culturales y financieras que impedían y desalentaban a las mujeres a la hora de crear e impulsar empresas.  

El informe Mujeres, negocios y la ley 2019 del Banco Mundial demostró que en una economía típica, se otorgaba a las mujeres solo tres cuartas partes de los derechos legales de los hombres en áreas relacionadas con la participación económica de las mujeres, incluyendo el emprendimiento.  Las mujeres emprendedoras también tenían menos probabilidades de tener acceso al capital humano, financiero y social. A nivel mundial, el número de empresas que son propiedad de mujeres es 40% menor que el número de empresas de hombres. Según el Informe sobre la brecha de género en 2019 del Foro Económico Mundial, se habrían necesitado nada menos que 257 años para alcanzar la paridad de género en la participación económica y las oportunidades. Entonces no es de extrañar que la brecha de género en la igualdad económica haya crecido aún más desde la pandemia. 

Las mujeres emprendedoras son fundamentales para promover una recuperación económica inclusiva e igualitaria en toda la región. El empoderamiento económico de las mujeres puede ayudar a crear un camino para salir de esta crisis mediante la creación de empleo, el crecimiento económico y la promoción de la igualdad de género. McKinsey estima que actuar ahora para garantizar la igualdad de género en las políticas macroeconómicas podría añadir nada menos que USD 13 billones al PIB mundial en 2030, en comparación con los escenarios regresivos en materia de género. 

También hay pruebas claras que demuestran que las naciones son más pobres cuando hay límites más fuertes a la participación económica de las mujeres. Dado el papel fundamental que desempeñan las mujeres emprendedoras en la reducción de la pobreza, la creación de empleos y la interrelación entre el espíritu emprendedor de las mujeres y el empoderamiento más amplio de las mujeres, el impacto de la crisis económica en las mujeres emprendedoras puede tener resultados negativos duraderos para la igualdad de género en general y el logro de las metas de desarrollo mundial.  

Invertir en las mujeres emprendedoras y promover el empoderamiento económico de las mujeres es también una cuestión moral y de derechos humanos. Es esencial que la justicia económica y la igualdad de género estén plenamente integradas en la recuperación económica post-pandémica. 

Ha llegado el momento de que todas las partes interesadas tomen medidas coordinadas y concretas para apoyar a las mujeres emprendedoras y al empoderamiento económico más amplio de las mujeres. 

Hay una necesidad urgente de situar a las mujeres en el centro de la política económica y garantizar una recuperación que tenga en cuenta las cuestiones de género, trabajando con las mujeres emprendedoras para diseñar paquetes de apoyo que lleguen a ellas y permitan que sus negocios sobrevivan a la pandemia. Además, es importante trabajar en el reto a largo plazo de la falta de acceso a la financiación para las mujeres emprendedoras y garantizar que, por ejemplo, los procesos de contratación pública sean igualmente accesibles para las mujeres emprendedoras.  

El reconocimiento de la desproporción de la carga en cuanto a cuidados es fundamental para cualquier programa destinado a reconstruir mejor. Por lo tanto, la recopilación de datos y pruebas a nivel nacional sobre el trabajo doméstico y de cuidados no remunerados es importante para crear políticas sensibles al género en consulta con las organizaciones locales de derechos de la mujer. Además, es importante que el debate político macroeconómico global aborde las desigualdades de género en las responsabilidades de cuidados que no son remuneradas. 

También es esencial que las voces de las mujeres emprendedoras y de sus organizaciones sean escuchadas por quienes ostentan el poder, tanto en Asia-Pacífico como a nivel mundial, y que las mujeres emprendedoras participen en cualquier otra negociación política que busque "reconstruir mejor". 

La Fundación Cherie Blair para la Mujer tiene un sólido historial de trabajo con mujeres emprendedoras en la región de Asia-Pacífico a través de tutorías, la galardonada aplicación Her Venture y el programa Road to Growth. La Campaña 100.000 mujeres tiene la ambición de llegar a muchos más miles de mujeres en la región para finales de 2022.